La fotografía participativa es una disciplina que otorga voz mediante la toma de imágenes a personas que no suelen ser vistas o escuchadas. Es una metodología de creación fotográfica colectiva que promueve la realización de proyectos artísticos de aquello que sus participantes conocen mejor, su realidad. Esta materia se enmarca dentro del arte participativo o comunitario en el que la ciudadanía se convierte en co-autora, editora y observadora de la creación artística.